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Mostrando entradas de mayo, 2010

LEVIATÁN, de Paul Auster

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Los finales son la parte más difícil de una historia. Cualquier escritorzuelo de tres al cuarto puede perpetrar un principio mas o menos interesante. Mantener el interés del lector durante el desarrollo se va haciendo  crecientemente difícil, pero lo realmente complicado es pergeñar un final memorable. Paul Auster cae en la tentación de quitarse de en medio el final cuanto antes: empieza la novela volando en mil pedazos al protagonista en la primera linea. Al conocer el suceso, el mejor amigo del difunto decide contar la historia de los hechos que lo llevaron hasta la muerte. Así empieza lo que será una suerte de biografía fragmentaria del escritor de una novela de culto, Benjamin Sachs , según el punto de vista de su amigo y también escritor Peter Aaron (claro alter ego del propio Paul Auster ). Con ese pretexto nos lanzará un auténtico desfile de personajes e ideas geniales, muchas de las cuales podrían haber dado lugar perfectamente a una novela entera. Auster las arroja

ROBIN HOOD, de Ridley Scott

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   Durante mi infancia vi el Robin Hood de Errol Flynn mas o menos un millón de veces. Durante mi adolescencia vi el Robin Hood de Kevin Kostner en casi el mismo número de ocasiones. La primera me sigue gustando aun hoy, la segunda la vi hace pocos años y me quedé asombrado de lo mala que me pareció, con lo mucho que me gustaba en su día (a pesar, o quizá incluso por culpa de Alan Rickman). No es de extrañar pues que esperara con muchas ganas el estreno del Robin Hood de Ridley Scott, un director del que siempre espero lo mejor, aunque ha demostrado en multitud de ocasiones que es capaz de lo peor.     Para este Robin Hood han tomado un camino totalmente distinto al de los dos anteriores, lo cual a priori parece una buena idea. En lugar de un largometraje de aventuras con damas en apuros, buenos muy heróicos y malos que son malos porque les parece divertido han escogido:  a) Desmitificar al rey Ricardo Corazón de León, personaje que posiblemente merece ese tratamiento, pero que muere

HABÍAMOS GANADO LA GUERRA, de Esther Tusquets

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  Esther Tusquets nos relata sus memorias de la infancia y la adolescencia durante la posguerra española desde un punto de vista al que estamos poco acostumbrados hoy en día: el de los vencedores. Nació en 1936, así que sus primeros recuerdos son de su familia celebrando que Franco había ganado la guerra. Se crió en una buena familia (por buena entiendase rica), en el reducido mundo de una niña pequeña, sin sospechar apenas que no todo el mundo quería al generalísimo, rodeada de gente que profesaba un catolicismo fanático. Esa niña se irá dando cuenta poco a poco de que existe otra España que pasa hambre y miedo. Se irá sintiendo cada vez más deferente de su propia gente y comprendiendo que ella, en realidad, no es de los que ganaron la guerra, sino de los que la perdieron.     Nos contarán esta historia por partes, no tanto cronológicamente cómo saltando adelante y hacia atrás para tratar un tema cada vez, de una forma muy natural, cómo quien cuenta una anecdota que ha contado ya mil

EL ANGEL SOMBRÍO, de Mika Waltari

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"Vine aquí para morir en las murallas de Constantinopla. Dispuesto a dar la vida por todo lo que ya pasó, por todo lo que ningún poder en la tierra puede restaurar. Se acercan tiempos muy distintos; no siento el menor deseo de verlos."     En el año 1453 d.C. los habitantes de Constantinopla se enfrentan a un grave dilema. El sultán Mohamed de los Turcos avanza hacia la ciudad con un ejercito de más de 200.000 hombres, mientras que defenciendo las murallas y el puerto hay menos de 10.000. Ante esta ciudad pueden hacer dos cosas: Defender la ciudad siendo fieles a su legítimo Emperador, griego cómo ellos mismos, a pesar de que este ha firmado la unión entre católicos y ortodoxos (cosa que ojos de los habitantes de los restos del Imperio Bizantino supone venderse a los herejes), con la esperanza de que el Papado mandará la flota que prometió a cambio y de que los Venecianos y Genoveses que forman la mayor parte del ejército que defiende Constantinopla no se repartirán la ciu

EL CONDE BELISARIO, de Robert Graves

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Robert Graves es uno de los más celebrados casos de historiador metido a novelista. En esta novela, nos cuenta las azañas de Belisario, un general que sirvió al Imperio Romano de Oriente en el siglo VI, bajo el gobierno de Justiniano. Éste último era tan ambicioso cómo mezquino, y quería pasar a la posteridad cómo Justiniano el Grande. Para ello consideraba que debía entre otras cosas, extender los territorios del Imperio con grandes conquistas. Sin embargo era un pusilánime, incapaz de tomar una decisión firme, y no era capaz de dar un paso sin consultar a multitud de consejeros, que a menudo lo aconsejaban mal. Fue así cómo decidió que debía reconquistar las tierras que habían pertenecido al Imperio y mandó tropas a tal efecto pero sin decidirse a gastar el dinero necesario ni a enviar suficientes tropas para tal efecto. Por fortuna o por desgracia, este necio Emperador tuvo al mejor de los generales.  Belisario había despuntado desde joven derrotando primero a los incursores hunos

THE BOX, de Richard Kelly

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Cuando ví Donnie Darko en el cine salí entusiasmado, realmente convencido que que Richard Kelly iba a ser un director a seguir. Pero a decir verdad, su siguiente película, Southland Tales, pasó tan desapercibida que ni siquiera me enteré de que había sido abucheada en  Cannes (en 2006). Después de eso fue un sonado fracaso de taquilla (no llegó a recaudar ni medio millón de dólares, de un presupuesto de algo mas de 15 millones). No puedo hablar con autoridad de esa película porque no fui capaz de soportarla hasta el final, pero sospecho que si me hubiese visto obligado a verla entera también la habría abucheado (aunque me consta que tiene algún defensor entre mis lectores). Con estos precedentes, no me arriesgué a ver "The Box" en el cine. Había perdido la confianza en Kelly y la premisa argumental me pareció algo rebuscada: un hombre misterioso con la cara inquietantemente desfigurada le entrega una caja con un gran botón rojo a un matrimonio, si lo pulsan, recibirán un mill

TIMBUKTÚ, de Paul Auster

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Hacía tiempo que quería leer algo de Paul Auster y, por puro azar, lo primero que ha caido en mis zarpas ha sido "Timbuktú" una novela corta que no suele citarse entre las grandes obras del autor. Se trata de una suerte de fábula moderna en la que se nos cuenta las peripecias de un perro, Mr. Bones, que gracias a la verborrea incontenible de su primer amo, ha aprendido a entender perfectamente el inglés, aunque no puede hablar porque su garganta no le permite articular las palabras. Los azares de la vida perruna le llevarán a pasar por tres amos muy diferentes y a dar cuenta de sus pensamientos sobre todos esos humanos y sobre cualquier otra cosa que se le pase por la cabeza. Auster escoge contar la historia así, cómo un rio de pensamientos desordenados que por asociaciones absurdas saltan de uno a otro, saltando adelante y atrás y adelante en el tiempo y a veces hasta hablando de cosas que no vienen al caso para nada. Cómo lector con tendencia a que mis ideas se dispersen co

IRON MAN 2, de John Favreau

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Iron Man 2 es una secuela más que digna, que repite los puntos fuertes de su predecesora, y les añade una pareja de villanos más carismática (uno por temible (Mickey Rourke) y el otro por repelente (Sam Rockwell). Si os gustó la primera, es difícil que no os guste esta, aunque desde luego os sorprenderá poco. Robert Downey Jr. sigue pareciéndome el mejor Tony Stark posible y nos brinda algunas escenas relamente graciosas. También en el apartado de la acción nos deja escenas espectaculares y dejan en ridículo a Michael Bay, dándo un espectáculo de combates entre robots que demuestran que la dos películas de Transformers no tendrían porque haber sido tan malas (hacer una secuencia que permita distinguir al robot bueno del robot malo, no solo es posible, sino que además en bastante fácil). Iron Man 2 no intenta ser más de lo que es, se limita a ser divertida y espectacular, sin más pompa de la necesaria. Tal vez lo único que lamente es que los personajes de Nick Furia (Samuel L. Jackson y